Para las personas que padecen Bocio, el papel del yodo
en su vida diaria es muy importante, hasta el punto de vista de su regulación
mediante medicación o ingesta de alimentos que lo posean. En los casos de esta
enfermedad, la hormona del tiroides
posee una proteína conocida como Tiroglobulina,
mediante esta proteína y el yodo se
produce la fabricación de la hormona
tiroidea, la cual mantiene en regulación nuestro tiroides.
Si el cuerpo no obtiene ese yodo, el tiroides se inflama; ¿Cuál
es la solución? Administrarle al cuerpo yodo
de forma artificial así se podrá equilibrar ese aumento del tiroides.
No obstante también puede suceder que nuestro cuerpo no
fabrique hormona tiroidea por una alteración
enzimática desvinculándose así del yodo
y no pudiéndose juntar con la proteína tiroglobulina, desencadenando nuevamente
en la misma consecuencia, el aumento de la glándula
tiroides.
La solución más sencilla por parte de los pacientes y la
cual suelen optar multitud de ellos es por comer alimentos ricos en yodo, ideales para combatir la enfermedad del bocio, entre los que más
se consumen están el pescado azul, la sal
yodada y los mariscos.
También poseen yodo las frutas como son las uvas, fresas, peras y membrillos.
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